La Segunda Epístola a los Corintios es uno de los libros del Nuevo Testamento en la Biblia. En esta carta, el apóstol Pablo defiende su ministerio, anima a la iglesia a perseverar en la fe y aborda temas de reconciliación, generosidad y fortaleza en medio de las dificultades.
El apóstol Pablo escribió esta epístola alrededor del año 56 d.C., probablemente desde Macedonia, poco después de escribir 1 Corintios. Esta carta es más personal y emocional, reflejando la relación de Pablo con los creyentes de Corinto y sus luchas en el ministerio.
La Segunda Epístola a los Corintios aborda varios temas clave:
La Segunda Epístola a los Corintios destaca el poder de Dios que opera en la debilidad humana y el llamado a la reconciliación con Dios y entre los creyentes. También resalta la importancia de la integridad en el ministerio, el consuelo de Dios en las tribulaciones y la generosidad como una expresión de fe y amor.
2 Corintios 1:3-4: "Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación."
2 Corintios 5:17: "De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas."
2 Corintios 12:9: "Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo."